John y Mary Gallinger eran muy conocidos y respetados en el centro de Nueva York, tanto por su exitosa empresa, Gallinger Real Estate, como por su compromiso con la comunidad en general. Tras servir en el Cuerpo de Señales del Ejército durante la II Guerra Mundial, John se licenció en la Universidad de Siracusa y pasó a fundar la empresa inmobiliaria que hizo crecer y prosperar durante muchos años. Activo en la comunidad, John fue anciano de la Primera Iglesia Presbiteriana, primer presidente del Consejo de Administración de la Fundación Eldercare y miembro Paul Harris del Club Rotario de Camillus. Tanto John como Mary dejaron un legado de excelencia en la comunidad local. Cuando falleció, el testamento de John ordenó la formación de este fondo en su nombre en beneficio de los servicios a los ancianos.
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